Con las declaraciones de Kel Calderón en «Podemos Hablar» y el posterior reporteo de «Primer Plano» este domingo, saltó a la palestra una vez más el drama familiar. Ahora, Nano Calderón aclaró que su enemistad con hermana no proviene del incidente con Hernán Calderón Salinas. ¿Por qué no se llevan bien?
Uno de los relatos que más conmovió el pasado viernes en el programa de Chilevisión fue el momento en que la joven empresaria habló de la muerte de su abuela. Recordemos que la abogada aseguró que no pudo ir a despedirse, porque su mamá prefirió no contarle y así evitar que se topara en la clínica con su hermano.
Ante estos dichos, Nano Calderón fue tajante al aclarar que la situación no fue como Kel Calderón lo planteó. «Cuando yo iba entrando a la clínica me crucé con Kel en el pasillo (…) Lo único que le pedí a mi madre es que por favor Hernán Calderón Salinas no vaya al funeral. Me dijo que se lo pidió, pero él contestó que iba a ir igual«, contó.
Sin embargo, señaló que su distanciamiento con su familiar proviene desde hace años. «(Por) un sinfín de problemas de ella atacando a terceras personas en mi vida que no vale la pena mencionar», afirmó, detallando que hubo una «gota que rebalsó el vaso».
El motivo que lapidó la relación de Nano y Kel Calderón
Todo habría partido porque Kel era embajadora de Cabify y, cuando aún tenían una buena relación, hicieron un trato. Mientras él le pediría los viajes cuando ella lo necesitara, ella le permitiría usar gratis su cuenta cuando lo necesitara.
Un día, estando con uno de sus mejores amigos, a quien describió como «la persona más estudiosa, esforzada y tranquila que puede haber», llamó a Kel para preguntarle por el favor de Cabify, porque ya era tarde. A pesar de querer contactarla, su hermana no contestó.
Pidió el viaje de todas maneras, sin pensar que fuera un problema. A los 20 minutos recibió un llamado de su amigo. El universitario le dijo que Kel llamó enojada al chofer del Cabify asegurando que ella no autorizó ese viaje. Nano la llamó, pero -según él plantea- su hermana le dijo que bajaría al amigo como fuera y le colgó el teléfono.
Lo terrible fue que, finalmente, su amigo amablemente entendió la situación y se bajó del vehículo. Así comenzó a caminar a su casa en altas horas de la noche y tras avanzar dos cuadras, lo asaltaron. «Lo golpearon, le robaron todo, quedó súper mal», narró el hijo de Raquel Argandoña.
«Le dije que jamás le perdonaría eso. Le dije que lo que le pasó a mi amigo, el cual toda la familia conocía y querían y ella se burló de la situación. Desde entonces, nunca más volví a hablar con ella», sentenció. En su comunicado, deslizó que pudo haber alguna oportunidad de recuperar su relación, pero esto ya no ocurrió.
«Yo tenía esperanzas de que ante esta situación ella me defendiera, le creyera a Rebe sobre el abuso y volviéramos a ser los hermanos que éramos, principalmente porque siempre se ha jactado de ser feminista y apoyar a las mujeres. Lamentablemente, al parecer, para ella cuando el abusador es su padre, no aplica», manifestó.
Para terminar, Nano Calderón fue enfático al señalar: «Yo, hoy en día no tengo padre ni hermana (...) Ahora que los involucrados sean felices mintiendo y cobrando en programas, de eso viven. Yo seguiré mi camino haciendo mi propia familia y rodeándome de la gente que realmente vale la pena», concluyó.
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